Sobrevivientes de la Primera Línea, y los Peregrinos del Clima piden ambición climática

El cambio climático es una cuestión de ciencia yde hechos, no de creencias u opiniones. La ciencia es clara y los hechos relacionados con el cambio climático, como los tifones y las sequías, han sido tan devastadores que tanto las comunidades seculares como las religiosas se alzan para instar a los líderes políticos a emprender acciones ambiciosas contra el cambio climático.

ECO destaca que después de más de dos meses de caminata desde el Vaticano a través de siete países, los participantes de laPeregrinación del Clima han llegado a Katowice para llamar a las Partes en la COP24 a responder al reciente informe del IPCC y tomar medidas ambiciosas para mantener el calentamiento global a 1,5°C, de conformidad con el Acuerdo de París. Simultáneamente, una peregrinación ecuménica sobre el climaque salió desde Bonn, ha llegado a Katowice, también exigiendo acción audaz.

La peregrinación climática consiste en peregrinos de Asia, los países del Pacífico, América y Europa, que han caminado 1.500 km (casi 950 millas) para llamar la atención del mundo a los graves efectos del cambio climático que ya están afectando sus hogares. Para estos peregrinos, la justicia climática es un asunto personal. Algunos de los peregrinos son sobrevivientes del tifón Haiyan, una tormenta vinculada al cambio climático que mató a más de 6.000 personas en el sudeste asiático. Uno de ellos, AG Saño, excavó los cuerpos de 72 de sus vecinos entre los escombros que resultaron de la tormenta, mientras que su hermano, Yeb Saño, dirigió la delegación de Filipinas a la COP19 en Varsovia.

Los peregrinos iniciaron su inspirador viaje en el Vaticano el 4 de octubre, y casi todos los días participaron en talleres y reuniones relacionados con el cambio climático con comunidades locales, estudiantes, medios de comunicación, alcaldes y tomadores de decisiones de alto nivel. En Viena, los peregrinos conocieron al presidente austriaco Alexander Van der Bellen. Van der Bellen recientemente lanzó una iniciativa para mayor ambición climática, firmada por 14 Jefes de Estado europeos (incluidos Alemania, Francia e Italia) y los primeros ministros de Holanda, España, Dinamarca y Suecia. En Polonia, los peregrinos del clima realizaron una actividad conjunta con la gente de la ciudad de Imielin en la región de Silesia, quienes se oponen a la construcción de la nueva mina de carbón duro, y en vez de ello solicitan el despliegue de energías renovables.

En los últimos meses, el Vaticano convocó a una conferencia de alto nivel sobre el cambio climático, y el Papa le dijo a los presidentes de las empresas petroleras que «la civilización requiere energía, pero el uso de la energía no debe destruirla». En su famosa encíclica sobre el cambio climático y la ecología «Laudato Si», el Papa Francisco afirma que «la tecnología basada en el uso de combustibles fósiles altamente contaminantes, especialmente el carbón, pero también el petróleo y, en menor medida, el gas, debe ser reemplazada progresivamente sin demora».