Genero-ando Progreso

¿La historia se está repitiendo o un fuerte compromiso con la equidad de género está realmente sobre la mesa? Ayer, durante las consultas sin plazo definido de la agenda 21 del SBI (Otros asuntos), la UE introdujo un borrador de decisión promoviendo la equidad de género en el proceso de negociación climática de ONU. La decisión en borrador, Promoviendo la equidad al mejorar la participación de las mujeres en las negociaciones en la CMNUCC y en la representación de las Partes en los cuerpos establecidos conforme a la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático o el Protocolo de Kioto es de hecho una re afirmación y fortalecimiento de una decisión ya tomada hace más de una década. Durante la COP7 en Marrakech, las Partes acordaron adoptar la Decisión 36/CP.7 que reconocía la importancia de la equidad de género en la toma de decisiones sobre el clima; impulsaron a las Partes a nominar a una mujer para ser elegible en puestos de CMNUCC; y solicitaron al Secretariado que se mantuviera la información sobre la composición de género de los cuerpos con puestos de electivos de la CMNUCC.

 

A pesar de esta decisión, la participación de mujeres en los cuerpos de la CMNUCC y como delegadas de las Partes se ha mantenido decepcionantemente baja. Con esto en mente, la delegación de la UE presentó esta nueva decisión para recordad a los participantes de la COP, sobre la importancia de la equidad de género. En muchas formas, la decisión propuesta es similar a la anterior: reconoce la importancia de la participación de las mujeres como parte de una política climática efectiva y equitativa; solicita al Secretariado que mantenga la información sobre la participación de las mujeres en las conferencias; y se pone como meta el balance de género en todos los cuerpos de CMNUCC.

 

Entonces, ¿para qué propósito sirve está decisión, más allá de recordar a la sesión plenaria lo que (esperamos) ya sepa? En primer lugar, es importante tomar notar de que cuando esta decisión se trajo a la Partes, fue introducida bajo “Cualquier Otro Asunto”. Esto significa que a las necesidades y preocupaciones de la mitad de la población no les fue dado un lugar propio en la agenda central de la COP. Adoptar esta decisión colocaría los asuntos de género y cambio climático en la agenda oficial de la COP para que los intereses de las mujeres no sean más considerados como una meta auxiliar de la CMNUCC. En segundo lugar, la decisión solicita al Secretariado que convoque a un taller en COP10 para discutir políticas y estrategias sensibles al género para avanzar en la equidad de género en la toma de decisiones sobre el clima. Finalmente, solicita a las Partes y organizaciones observadoras que presenten, para el 31 de septiembre de 2012, sus visiones sobre las opciones y caminos para avanzar en la meta de la decisión.

 

El sonoro apoyo de las Partes (incluyendo Bangladesh, Ghana, Irlanda, India, Malawi, México, Nepal, Pakistán, EAU y los Estados Unidos) y algunas revisiones del texto durante las consultas co- presidida por Kuni Shimada (Japón) y el Embajador Diseko (Sudáfrica). El grupo de Mujeres y Género de la CMNUCC propuso remplazar “al” con “y” en el título del borrador de la decisión. Esta enmienda aparentemente inocua asegura que la participación equitativa de las mujeres es reconocida como un derecho procesal, mientras que los resultados sobre equidad de género de la CMNUCC sería reconocido como una meta en este derecho propio. El Grupo de Mujeres y Género también sugirió fortalecer el párrafo solicitando un taller dentro de las sesiones, borrando la referencia a este taller como sujeto a “recursos disponibles”.

 

La decisión tomada en Marrakech surgió cuando el debate sobre “género y clima” se trataba básicamente de resolver la casi completa ausencia de mujeres en el proceso. Esta nueva decisión hará frente a vacios aún existentes. Hemos recorrido un largo camino desde entonces en el reconocimiento de que la equidad de género va más allá de la participación en la toma de decisiones. Los resultados de la COP16 y COP17, por ejemplo, incluyeron lenguaje sobre una variedad de asuntos críticos para la vida y subsistencia de mujeres y hombres. Al remplazar “al” con “y”, una decisión que cierre la brecha sobre los derechos procesal de las mujeres podría adoptarse. Pero también abre espacios para discusión sobre como promover resultados sobre equidad de género, como comenzaron a hacer las COP16 y 17.