Necesitamos hablar
Realmente deberíamos hablar de eso. Ya sabes, la crisis que enfrenta el planeta.
Es importante, ¿verdad? Ya lo hemos hablado mucho.
Tal vez pensemos que sí, pero parece que hay algunos que no …
Las Partes acordaron en la COP23 que el Diálogo de Talanoa se diseñaría para mejorar la ambición. Sin embargo, ese espíritu parecía haber escapado a algunas partes en sus intervenciones en los eventos del Diálogo Talanoa ayer. Tal vez no hubo un Partido que pareciera más opuesto a la ambición en Talanoa que Egipto.
A pesar de los hallazgos del IPCC de que las contribuciones actuales determinadas a nivel nacional (NDC, por sus siglas en inglés) nos pusieron en camino al calentamiento de 3oC o más, y las numerosas llamadas a la COP24 para acciones y objetivos urgentes a mayor escala antes de 2020, Egipto dejó en claro que no tenían interés en discutir más NDC ambiciosos antes de 2020.
Además, duplicaron su estrategia de no- ambición, y dijeron que Talanoa no debería
de tener un resultado negociado. Tal vez se les haya escapado el hecho de que estamos aquí en las «negociaciones sobre el clima», que discuten la cuestión definitoria del siglo XXI: es una escasez de ambición, pasada, presente y futura, para abordar el cambio climático. Necesitamos resultados que comprometan a los países a ampliar los esfuerzos climáticos en el período anterior a 2020 y posterior a 2020, ¡no más agacharse y tejerse para esquivar la discusión sobre la ambición! Sin duda, Egipto está dividido entre sus lealtades hacia el Grupo Árabe dominado por el petróleo y la solidaridad con sus miembros del Grupo Africano, muchos de los cuales son PMA y extremadamente vulnerables a las interrupciones climáticas. Pero esquivar la ambición, en cualquier período de tiempo, perjudica a ambos.