Al momento de escribir; no sabemos todavía el resultado final de la COP en Polonia. Sin embargo, ECO se siente lo suficientemente confiado para enviarle a las Partes un fuerte recordatorio de lo que está en juego y lo que debe llevarse a cabo el año siguiente en casa para cumplir colectivamente con los requisitos establecidos por el ratificado Acuerdo de París.
Las emisiones industriales de CO2 para el 2018, recientemente proyectadas por el Inventario Global del Carbón muestran un aumento del 2,7% para este año en comparación con el 2017. Otro año record: el más alto desde que la humanidad descubrió el fuego hace milenios. Y muy probablemente el mayor aumento en la historia, con más de mil millones de toneladas de CO2en sólo un año. Los combustibles fósiles para la energía y procesos industriales, incluyendo metano, ahora constituyen cerca del 80% de todas las emisiones globales de GHG. Al mismo tiempo, las concentraciones de CO2en la atmósfera alcanzaron alrededor de 410ppm, las más altas en muchos millones de años.
Si los países, En particular los grandes y ricos contaminadores climáticos, continúan avanzando en nuestro actual camino, naciones enteras, particularmente Estados en islas vulnerables y muchos ecosistemas frágiles, como el Ártico y los arrecifes tropicales de coral, corren riesgo de vida. Estamos llegando a puntos críticos donde el derretimiento de los hielos terrestres puede causar el irreversible aumento del nivel del mar, continuando mucho después del año 2100, cambiando el mapa físico de los países y poniendo a cientos de millones de personas que viven en las costas en riesgo de evacuación (por nombrar por lo menos algunos de los impactos climáticos que ya afectan gente alrededor del mundo).
ECO apura a las Partes a tomarse el recientemente acordado IPCC de 1.5°C muy seriamente. Y a pelear contra el rechazo del informe por algunos de los más grandes productores de petróleo, carbón y gas, como Arabia Saudita, Estados Unidos y Rusia.
No estamos ni siquiera en camino de alcanzar los compromisos climáticas insuficientes, NDS, en la mayoría de las naciones. Estamos en vías de un calentamiento global de mucho más que 3°C.
Los gobiernos deben comenzar inmediatamente, de manera transparente y participativa, a mejorar sus compromisos NDCs para 2020. Las presentes NDCs están basados en números actualizados pre2015. Nuevos análisis muestran costos de inversión mucho más bajos para energías renovables y eficiencia energética, así como para soluciones climáticas naturales concentrándose en la restauración ecológica de tierras y bosques degradados.
ECO repite: tenemos doce años para revertir el cambio climático desastroso en el futuro, y embarcarse en una necesaria y profunda transformación.
En resumen, el Carbón debe irse rápidamente para 2030 en las Naciones más ricas y antes de 2050 en los países en vías de desarrollo. La deforestación debe parar ahora.
ECO urge fuertemente a las ricas y altamente contaminantes Partes a comprometerse significativamente en el apoyo a las comunidades vulnerables y las naciones pobres, por ejemplo para energía limpias, adaptación, y para asegurar un sistema de Pérdidas y Daños que funcione.
Finalmente, ECO está feliz de ver a una multitud de actores no estatales: ciudades, negocios y comunidades, que están acelerando sus esfuerzos para comprometerse con objetivos fuertes de decarbonizacion, y que están cambiándose de las inversiones que empequeñecen los compromisos gubernamentales en muchos países.
ECO aplaude a todas las organizaciones civiles de la sociedad – ‘Civil Society Organisations’ (CSO) – por sus acciones de funcionamiento y protesta ante las actividades de la industria mundial de combustibles fósiles que continúa amenazando la salud del planeta. ECO espera que los gobiernos mundialmente apoyen a las CSO con legislaciones domésticas y otros esfuerzos para salvar la atmósfera de mayores niveles de contaminación por carbono.
Todo esto ciertamente no es mucho pedir en un momento navideño para los gobiernos -proteger el planeta de un calentamiento global irreversible y de impredecibles impactos en todos los sectores y regiones de la sociedad y la naturaleza.