Ayer en los vestíbulos de la COP18 en Doha había gran alboroto por un anuncio de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) durante la reunión del grupo de la Plataforma de Durban para las acciones mejoradas (ADP). El país del Golfo anunció acciones concretas que estaría tomando para hacer su parte para reducir el cambio climático. EAU anunció que abrirán una planta de 100 mega watts (MW) este año usando Potencia Solar Concentrada (CSP), mientras prepara otra de 100MW utilizando Fotovoltaicos (PV).
Estas son noticas emocionantes, tomando en cuenta que los EAU pertenecen a un grupo de países que históricamente no han sido responsables por emisiones totales comparativamente grandes. El mundo árabe en específico actualmente solo es responsable por una fracción de las emisiones mundiales totales y están aún catalogados como una región en desarrollo.
Los EAU ya son uno de los países más activos en materia de energía renovable. En años recientes ha mostrado un impulso para mejorar su infraestructura en varios aspectos y el sector de generación de energía no es la excepción.
Son numerosos los ejemplos de lo anterior, tales como el incremento de generación con energía solar (incluyendo un programa piloto de azoteas solares) y energía eólica, adaptada al clima de la región. Varios proyectos de transito masivo, como los metros de Dubai y Abu Dhabi, y el sistema nacional de trenes, están en desarrollo. Siguiendo con el sector transporte, diversas estaciones de gas en la capital están involucradas en fases iniciales para el impulsar para modernizar (retrofit) los vehículos para que utilicen gas licuado de petróleo.
ECO espera que este anuncio de último minuto en la COP18 sea un presagio de que falta mucho más por venir. ECO es cauteloso, ya que EAU anunció también que estaría adoptando energía nuclear y captura de carbono y secuestro (CCS), para lograr sus metas de mitigación. CAN no aprueba este último anunció y animaría fuertemente a EAU que desestime ese camino y en su lugar se enfoque en su muy prometedora mezcla de energías renovables.
Los EAU se harían a sí mismos y al mundo un gran favor si voluntariamente hicieran la promesa de comprometerse a reducir la contaminación climática y comprometiendo sus ya existentes acciones de mitigación. Tal gesto reafirmaría la active postura de los EAU sobre el clima y con suerte animaría a otros países a tomar compromisos similares, y empujaría a los países desarrollados a tomar compromisos vinculantes.
Este mensaje ya ha sido comunicado a ellos por el Arab Youth Climate Movement (AYCM) y Greenpeace.
ECO mantiene la esperanza de que esta movida de EAU pueda servir como un catalizador para el cambio.