El Ministro del Ambiente Peter Kent, llegó a ayer a Doha bajo la gran sombra de las arenas bituminosas.
Desde Durban, su gobierno ha estado trabajando duro para desmantelar las leyes canadienses de protección ambiental para acelerar la extracción del recurso, una iniciativa que el gobierno ha estado promoviendo bajo el slogan Orwelliano de “desarrollo responsable del recurso”.
ECO ha advertido una y otra vez acerca de la tenebrosa influencia del masivo depósito canadiense de carbono intensivo de “petróleo no convencional”. Más largo en extensión geográfica que todo Qatar, y generando mas emisiones que todo Nueva Zelanda, las arenas bituminosas han sido llamadas la “bomba de carbono” más grande del planeta.
Las proyecciones del propio departamento del Ministro Kent muestran que el crecimiento de las emisiones provenientes de las arenas bituminosas para 2020 (73 TM) virtualmente anularían todas las reducciones de emisiones en la economía de Canadá (75 TM). Y todavía Ottawa no ha hecho nada para limitar o reducir la contaminación de los sectores que emiten GEI.
Todo lo contrario, — los documentos del gobierno sugieren que Canadá ha tomado las políticas climáticas internacionales para la investigación de algunas de las más grandes corporaciones de arenas bituminosas.
Buenas noticias para el caso de trofeo fossil de Canadá; Los CEOs adoran lo que ellos llaman un “enfoque elegante”. Así que, un nuevo informe de la Delegación Juvenil de Canadá, Temas Comprometidos, excaven en la ‘huella de Expansión” del alquitrán, documentando los planes del sector para sobrepasar los niveles de producción delineados en el escenario 450 de la AIE. Viendo cómo el Gobierno canadiense está ligado a su petróleo sucio, no sorprende que los subsidios actuales a la industria de combustibles fósiles sobrepase al financiamiento climaático a por un 7 a 1.
Ahora mismo, el enfoque de “pequeño” taladro” de Canadá para arenas movedizas está manchando la reputación del país, manteniendo su política climática de rehén en el proceso. Supuestamente quiere mostrar al mundo que el cambio climático le interesa a su gobierno. Para hacer eso, Ministro del Ambiente Peter Kent es preciso comenzar a develar alguna política dura y verdadera sobre el alquitrán esta semana en Doha.